Quiero un Grey. ¿Estás segura?

    Primero de todo decir que yo también lo he leído e incluso releído. 

Que me pareció una historia interesante ya que nunca había leído una novela de ese estilo. 

Y que estuve enganchada durante 5 días hasta que me terminé la trilogía.

Y ahora, dicho esto, echemos unas risas.

Cuántas veces he oído "Ains, quiero un Grey en mi vida..." y yo me pregunto "¿En serio?"

El tema es que somos muy listas y nos quedamos sólo con lo que nos interesa. Porque, a ver, ¿con qué nos hemos quedado de la historia? Que está buenísimo, alto, atlético, deportista, sano, sabe pilotar aviones e incluso helicópteros, multimillonario (bueno, esto habrá quien lo coloque en primer lugar, pero no es el tema)... Con esto es con lo que nos quedamos ¿verdad? 

¿Y el resto? Del resto nos hemos olvidado. Las sombras se quedaron en el título, ¿eh?

Ese acoso del principio, que aparece en tu curro así, como quien no quiere la cosa, a kilómetros de distancia para comprar unas bridas... ¡Vamos! ¡Menudo acojone! Me pasa a mi y una de dos, o huyo como una loca dando gritos o le meto una patada en la entrepierna que se le quitan las ganas para siempre jamás.

El contrato. Bueeeenoooo, ¿nos acabamos de conocer y venimos con papelitos? Encima te dice que son "sus condiciones". Que las leas, las estudies y si estás de acuerdo firmas y seguimos. ¿Tus condiciones? Ja ja ja risas mil. ¡Vamos, no jodas! Mira guapo, vete a casita con tu mamá y que te firme autógrafos. 

El coche. Uys... Ya sí que por ahí vamos mal, muy pero que muy mal... ¡Nadie se mete con mi coche! ¡Bastante! Bastante me importa si le gusta o no, me gusta a mi y punto. Es mi coche y si no le acepta a él no me acepta a mi. Y no hay discusión posible.

Que tienes que dormir ocho horas. ¿¿Ocho horas?? ¿¿Ocho horas?? ¿¿Tanto?? ¿Lo que viene a ser que mis días se quedarían sólo en dieciséis horas? Sí hombre, no te lo crees tú ni harto a vino! Acuéstate tú que ya, cuando eso, iré yo... ¡Faltaría más!

Come, tienes que alimentarte. ¡Y dale con el comer! ¡Tanto come, come, come que se me ha quitado el hambre! Ea, ahora no como por tu culpa. Si es que no se puede ser más pesao... Ahora voy a hacer huelga de hambre mira tú por dónde! ¡¡Ascancias me han entrao!!

"Yo no hago el amor, yo follo duro". Hijo mío... no se puede ser más basto! Creí que tenías una educación pero parece ser que las apariencias engañan... ¿O es que tienes algún problema de frenillo? A ver si lo que quieres es follo con fatatas fritas... después de tu insistencia con la comida creo que es lo más acertado...

Después de aceptar todas sus sugerencias, lo cual no es nada fácil, pongamos que seguimos adelante. Resulta que a él lo que le mola es tener una sumisa y azotarla y... ¡¡¡TURURÚ!!! ¡Ya es lo que faltaba para llevarse todas las papeletas! Que estás toda emocionada y viene y te dá un cachete y el sopapo que se encuentra ni lo ve venir! ¡Vamos, que se le quitan las ganas de volver a levantar la mano ni para saludar!

Todo esto no es más que el principio pero... ¿qué? ¿Seguís queriendo un Grey en vuestra vida?
Yo creo que conmigo hubiese durado poco.
Menos mal que encontró a Anastasia para que la historia fuese más larga.
Ay señor Grey...