Páginas - Menú
▼
miércoles, 26 de febrero de 2014
El pozo
Parece ser que quien más te quiere te tiene que dar ánimos, apoyar, ayudar y subir la moral pero resulta que termina siendo quien más te hunde.
No todo se basa en que te halaguen constantemente y que te den la razón en todo, no; las críticas son buenas pero, las críticas que son constructivas, las que son para mejorar, las que te hacen ver un poco más allá; no las críticas destructivas que esas te llevan a un pozo en cuestión de segundos...
Yo me pregunto ¿por qué lo harán?
Quizá porque quieren tener siempre más, ser más, llamémosle ¿egoísmo enfermizo?
Da igual lo que tú puedas llegar a hacer, las cualidades que tengas o lo que consigas, ellos siempre tienen que tener más, ser más, y no pueden o no saben, valorar a una persona en un momento en el que le está mostrando sus cualidades y progresos.
Puedes pasar de una gran satisfacción y orgullo de lo que has hecho o conseguido que, gracias a ellos, te encuentras pensando que todo lo que te has esforzado no ha servido para nada.
Todo esto hay que aprenderlo, asimilarlo, asumirlo y aceptarlo.
Ahora, tú nunca les pagues con la misma moneda, ¡eso no! Porque si ellos hacen sus críticas, están haciendo lo correcto, sin pensar en cómo lo estás recibiendo, pero si las haces tú... -es que no tienes ni idea... es la respuesta mínima que te puedas esperar.
Tal vez sea mejor preguntar por fuera de tu ámbito o, simplemente, sacar tus propias conclusiones, al fin y al cabo tú y solamente tú, sabes lo que te ha costado conseguirlo.
El roce hace el cariño, sí, pero la confianza da asco.
En contínuo aprendizaje.
No hay comentarios:
Publicar un comentario