A buen entendedor pocas palabras bastan, ¿o no?

  Buen entendedor... ¿quién es buen entendedor? Fácil, alguien que escucha lo que estás diciendo y entiende tus palabras, percibe tu tono y comprende el significado de lo que estás hablando. Hablando, porque escrito es otro cantar.

  Porque hablando con ironía se entiende tu tono irónico, aunque hay excepciones que no lo pillan ni de coña, pero ¿y escrito? Pues que o bien te conocen y saben que eso es una ironía tuya o tienes que explicarlo a modo de #IroníaModoOn para evitar contestaciones de lo más sorprendentes. No os podéis ni imaginar la cantidad de interpretaciones que se le pueden dar a un comentario irónico, tantas como personas hay en el mundo.

  Lo que yo no me podía haber imaginado nunca es la ironía como sistema de venta de productos. Y aquí va la explicación.

  Al terminar el verano y empezar el frío, me di cuenta que tenía la piel un poco seca, normalmente me suele pasar cada año, no es una cosa que se note si quiera pero sí lo noto yo, entonces decidí comprar un gel diferente al que uso para repararla.

  Pedí un gel para piel seca y me trajeron esto...

  Bueno, aparentemente se lee bien, "HIDRATANTE. PIEL SECA. CON EXTRACTOS. DE OLIVA Y LECHE. GEL. DE DUCHA. OLIVA. ph neutro para la piel". Vale, pues vamos a probarlo.

  Los primeros usos, pues como todo, apenas se nota si funciona o no. Pero tras el uso continuado pasé de tener la piel un poco seca a tener esto...

Imagen piel vista sin zoom #IroníaModoOn

  No podía explicármelo. No me había pasado nunca. Así que tenía que ser el nuevo gel.

  Lo leí por delante. Lo leí por detrás. Leí la letra pequeña y... y descubrí que quizá había entendido mal.
  Quizá entendí lo que yo quería leer, que era un gel que si tienes la piel seca te la hidrataba, pero si lo lees tal cual no dice tal cosa. Hidratante piel seca, pues eso, que te hidratas para tener la piel seca, pero seca... seca, vamos, que se te queda más seca que un zumo de magdalenas, más seca que un bocata de polvorones, más seca que los talones de la mujer que se pone sandalias cuando llega el buen tiempo, vamos, SECA.


  En un principio había pensado enseñároslo para deciros que no lo compraseis y tal, pero tras arduas reflexiones llegué a la conclusión de que era mejor recomendarlo para aquellos que queráis tener la piel más seca, como por ejemplo, para personas que vivan en zonas de abundantes lluvias.

  A buen entendedor pocas palabras bastan

y pocas palabras bastan para que no entiendas nada.

Pensé, creí...

  Siempre pensé que sería incapaz de dormir sin ti y...
descubrí que dormía mejor sola.

  Siempre creí que no podría vivir sin tu roce en mi piel y...
comprobé que no hay caricia que no pueda proporcionarme a mi misma.

  Siempre asumí que necesitaba tu calor y...
encontré muchas y variadas formas de mantener en perfectas condiciones mi temperatura.

  Los días pasan y la vida sigue, incluso la mía, a pesar de todo.
  Los "penseques" y los "creíques" se acabaron.
  Todo tiene solución y, a veces, hasta mejora.

  Oda al pijama.

No es tiempo perdido si ha sido bien invertido.

  ¡Hola, hola mundo!

  ¡Por fin reaparezco!

  Después de estos meses de preparación intensiva estoy lista para continuar con las tareas, las batallas y, sobre todo, con el blog, faltaría más.

  He estado tentada muchas, pero que muchas veces, de perderme por aquí y compartir con vosotros mis aprendizajes paso a paso pero de vez en cuando hay que ser un poco sensata, tener paciencia, que como decía mi abuelo "es la madre de la ciencia", y el tiempo se encarga de dar los mejores resultados...

  Tengo que volver a poner en práctica a mi paciencia, eso sí, tras este tiempo de inactividad se me ha llenado la memoria de textos que quieren ser leídos y pretenden salir todos a la vez. Tendré que poner un numerito para que vayan cogiendo la vez y no se peleen entre ellos. Espero poder ser justa y conseguir que cada cual tenga su espacio, su tiempo y no dejarme ninguno en el olvido.

  En estas largas semanas el trabajo ha sido duro, agotador, exhaustivo, complicado, solitario... sin salario ni días libres... sin valor ni reconocimiento externo... a veces sin ganas, otras veces sin fuerzas, otras con una increíble energía... Intentando mantener la balanza equilibrada entre la sensatez y la paranoia.

  Pero ¿sabéis qué? Que me siento muy orgullosa.

  Todo pasa por algún motivo, para aprender, por ejemplo.

  Todo pasa...

  Y lo que tiene que pasar, pasará tarde o temprano. Ahí estará nos guste o no. Pero depende de nosotros mismos el cómo lo pasemos, si queremos perder nuestra esencia y personalidad y dejarnos llevar, o queremos ser la persona que somos sin ataduras ni mordazas, pese a quien pese.

  Que nadie dijo que fuera fácil, ni mucho menos lo voy a decir yo, pero siempre pensé que no era imposible.

  Ha tenido que pasar el tiempo, sí, os he echado de menos, también, ahora, una cosa os digo...

no es tiempo perdido si ha sido bien invertido.

Perdón por la tardanza.

Gracias por la espera.

La espartana vuelve.

Más piedras en el camino, más consigo crecer.

  No conozco sus motivos que le llevaron a mentirme. No conozco las razones que le impulsaron a mentirme. Ni lo sé, ni lo quiero saber. Para ser más precisa, le diré que a mí no me corresponde, si no que debería ser usted quién buscase la explicación, ya que fue usted quien prefirió que fue mejor mentir antes de contar la verdad.

  En otra época seguramente me habría importado bastante, pero hoy estoy dando valor a lo que realmente importa y considero que usted a mí no me ha mentido, se ha mentido a usted mismo.

  Usted, con su mentira, no sólo ha logrado salir del paso, ha implicado más. Ha conseguido que pierda la credibilidad en usted, la confianza e incluso el aprecio que por usted sentía.

  Usted ha subestimado mi olfato e inteligencia. Quizá le haya parecido fácil, pero para mí ha cruzado la línea que no debería haber cruzado.

  No discutiré con usted en absoluto, no merece la pena, ya que sólo serviría para que lanzase más mentiras y seguiría dañándose usted de nuevo.

  Una mentira no rectificada sólo lleva a más mentiras.

  Aún así, quiero que sepa que todavía puede usted contar con mi respeto. Porque usted se puede comportar como mejor le parezca, eso hará que yo cambie mi actitud hacia usted, pero no hará cambiar nunca mis valores.

  Ahora, siga usted caminando por la senda que usted considere más apropiada, pero tenga en cuenta que mi confianza ya la perdió.

Más piedras en el camino,

más consigo crecer.